Hemos escuchado hablar del Trastorno depresivo mayor, mejor conocido como Depresión, en la televisión, radio y redes sociales, se conoce que tener este padecimiento afecta a la calidad de vida, el trabajo, la familia. Las emociones involuntarias se instauran en el pensamiento y en las acciones de las personas y por ello es importante tener atención a los síntomas que pueden parecer inocentes o normales, pero después de 6 meses se vuelven síntomas emocionales, físicos y cognitivos. Algunos síntomas de depresión son más reconocibles que otros.
Si bien todas las personas con un diagnóstico de TDM experimentan depresión, estado de ánimo y/o disminución del interés o el placer de hacer las cosas, una lista de posibles síntomas incluye:
- Sentirse deprimido o sin esperanza
- Poco interés o placer en hacer cosas
- Dificultad para concentrarse, pensar o tomar decisiones
- Sentirse cansado o tener poca energía.
- Problemas para conciliar el sueño, o permanecer dormido, o dormir demasiado
- Falta de apetito, comer en exceso o cambios significativos de peso
- Moverse o hablar lentamente, de modo que otras personas se han dado cuenta, o ser tan inquieto que te has estado moviendo mucho
- Sentirse mal consigo mismo, que usted es un fracaso o tienen mucha culpa
- Pensamientos de que serías mejor muerto o de hacerse daño de alguna manera.
El Trastorno Depresivo Mayor ocurre cuando ciertos químicos en el cerebro están desequilibrados.
Estos químicos, llamados Neurotransmisores, envían mensajes de una célula cerebral a otra actuando sobre receptores específicos. Un antidepresivo logra aumentar la actividad de un neurotransmisor llamado serotonina en el cerebro bloqueando la recaptación de serotonina.
La depresión u otras enfermedades mentales son causas más relevantes de pensamientos o acciones suicidas. Pon mucha atención a cualquier cambio, especialmente cambios nuevos o repentinos en el estado de ánimo, comportamiento, pensamientos, o sentimientos. Llame a su médico u obtenga ayuda de emergencia de inmediato si tiene síntomas tales como:
- Pensamientos o acciones suicidas
- Impulsividad
- Agresividad o acciones violentas
- Ansiedad o ataques de pánico
- Agitación
- Inquietud
- Irá
- Irritabilidad
- Dificultad para dormir
- Aumento de la actividad o del habla
- Disminución de la actividad o del habla
- Otros cambios inusuales en el comportamiento o el estado de ánimo, especialmente si son nuevos, peores o preocupantes.
Por ello te invitamos a evaluar cuál de estos síntomas has notado en algún familiar, conocido o incluso en ti mismo, después de detectar estas señales es momento de actuar para mitigar la depresión, por ello la principal sugerencia es acudir con un profesional de la salud mental psicólogo y psiquiatra, en las sesiones se evaluará el origen, el tratamiento y otras recomendaciones que podrás aplicar en diversas áreas de tu vida.