Imagina que tienes un enorme jardín y que tú eres el único responsable de cuidarlo, en el jardín las plantas representan tu vida, miremos bien tu jardín y encontraremos tu familia, tu trabajo, tu pareja y todo aquello que tanto amas y anhelas. Ahora preguntémonos
¿Las plantas están bien cuidadas? , ¿Tienen flores? , ¿Te agradan su olor y su color?
¡Recordemos que las plantas no siempre dan las flores en el lugar que deseamos o son del color que imaginamos!, pero sabiendo esto, ¿Cómo estás cuidando de tus plantas?
En el jardín también hay semillas, aquellos sueños que anhelamos tanto y el cuidado de esa nueva planta representará nuevas acciones que están encaminadas a hacerla crecer y florecer.
Pero quizá haya una planta a la que has dedicado más tiempo y esfuerzo donde incluso ha surgido la mala hierba, aquella que intentas arrancar o quitar cada vez que aparece, pero aún con todo el trabajo realizado parece seguir creciendo más y más alrededor de la planta que cuidas con gran interés.
¿Te ha sucedido dentro de tu jardín?
La mala hierba asemeja a nuestros problemas y las dificultades que aparecen en la vida diaria y todo lo que esto representa, como la tristeza, el miedo, la culpa, la vergüenza o el odio.
¿Has intentado deshacerte de ellos como lo has hecho con la hierba?
Pero seguro días más adelante la hierba aparece, aún después de arrancarla de raíz.
Habías notado también que quizá has descuidado a otras plantas por trabajar todo el día sobre la mala hierba que aparece en aquella que tanto amas, te ha desgastado que incluso no te ha dado tiempo de cuidar a las demás. ¿Cómo vez tu jardín ahora? ¿hay alguna planta marchita u olvidada?
¿y si la mala hierba ayudase a tu planta a florecer y crecer? ¿qué pensarías ahora de la mala hierba?
También te has impacientado arrancando aquella planta que no ha crecido como esperabas, su color no era el que tanto esperabas, y ya no has podido verla crecer, pero si el jardinero arranca de “cuajo” y siembra otra semilla nunca verá crecer la planta y su vida solo girará en sembrar semillas sin vivir cada momento del crecimiento.
¿Estarías dispuesto a cuidar del resto de las plantas sabiendo que la mala hierba estará ahí? O ¿que la planta puede tardar en crecer y quizá no sea el color o el tamaño que esperabas?
Una opción más es cuidar de las plantas, con lo que ofrezcan para ti en cada momento que tengan de vida dentro de tu jardín.
Recuerda solo tú puedes cuidar de tus plantas, solo tú eres dueño de tu jardín, nadie más podrá 
hacerlo.
No olvides el acompañamiento psicológico que se brinda en cada tratamiento de Reproducción Asistida, acude y recibe una atención especializada. Si tienes dudas relacionadas a esta metáfora acércate al área de atención psicológica.
Fuente: “Terapia de aceptación y compromiso. Un tratamiento conductual orientado a los valores”. Kelly G. Wilson y M. Carmen Luciano Soriano