Saludos pacientes Irega y lectores asiduos, el día de hoy revisaremos algunas recomendaciones para realizar sus compras de manera precavida y evitar los riesgos de contagio por COVID-19, ya que algunas pacientes o parejas se encuentran en la espera para continuar su tratamiento o iniciar algún procedimiento de técnicas de reproducción asistida, ya que se han parada las actividades a nivel mundial y nacional en nuestro país por la pandemia.
El realizar una buena planificación de tus compras es una estrategia que se pueda aplicar en cualquier área y que te puede ayudar para seguir con tu plan alimenticio que te dejó tu nutrióloga/o que serán de vital importancia para continuar con tu plan de ser futuros papás, y el simple hecho de Guardar distancia de 1.5mts o más disminuirá el riesgo de contraer este temible enfermedad. Es muy sabido que la higiene de manos son factores esenciales para la seguridad propia y de los todos los que conviven contigo.
Es nuestro deber es mantenernos en casa y evitar el contagio por coronavirus a toda costa, para ayudar a #FrenarLaCurva y cumplir unas normas de seguridad a la hora de hacer la compra.
El limitar nuestras salidas para comprar a lo estrictamente necesario. Para ello, es necesaria una planificación de los alimentos que necesitaremos, con el objetivo de poder reducir nuestras visitas a los centros de alimentación.
Hacer la compra es una actividad que se rige por unos nuevos patrones. No es raro ver cómo en la puerta de los supermercados las personas están hacen colas, con cubre bocas, guantes y definitivamente existe el riesgo de comprar en las tiendas, en particular si la tienda está llena. Hay más riesgo de transmisión de persona a persona que tocando productos en la tienda de comestibles.
En teoría, si alguien con COVID-19 estornudó, tosió o extendió sus gotitas respiratorias infectadas en un carrito de compras o en la puerta de la tienda, y una persona no infectada tocó esas gotitas respiratorias al abrirla o agarrar un carrito, y luego se tocó la cara, la persona no infectada podría infectarse y enfermarse.
Hasta el momento no está demostrado que el coronavirus sea considerado una ETA, una enfermedad transmitida por alimentos. Sin embargo, los alimentos tienen lo que se denominan empaques o envases, porque si decimos que el coronavirus está presente en las superficies, el riesgo está en que una persona enferma las haya manipulado.
¿Por qué solo debe una persona salir por familia?
El riesgo de contagio es menor si solo una realiza las compras; de esta manera proteges también a grupos más vulnerables como embarazadas, personas con enfermedades crónicas, adultos mayores y niños, especialmente si convives con ellos.
NO salgas si antes no tienes tu lista de compras.
Una lista con los artículos que necesitas hará más eficiente tu compra y debe incluir el nombre, la cantidad o tamaño, la marca y, dependiendo el caso, sabor; incluso puedes mencionar las zonas o pasillos donde se encuentran dentro de los establecimientos, esto con el objetivo de facilitar el recorrido y disminuir el tiempo de tu estancia en el lugar.
Fijar un horario para hacer tus compras
Existen horarios en los que acuden más personas a realizar sus comprar, por lo que recomendó identificar, de acuerdo con las características de cada lugar, el mejor momento para asistir: y entre más temprano, mejor, pues es cuando hay menos conglomeración de personas.
Antes de salir de casa, conviene tener una cosa clara: cuanto más tiempo pasemos haciendo la compra, mayor será el riesgo que corramos y la posible exposición al virus.
Cuidados dentro del súper
Como acudir al super
Créditos autor desconocido
Recuerda que, por muchas precauciones que tomes, algún producto (o superficie) puede estar contaminado. Conviene andar por la parte central del pasillo, para evitar toser o hablar encima de los productos; respetar siempre la distancia de seguridad, porque mientras estemos afuera no podremos lavarnos las manos, que es lo más efectivo para eliminar la presencia de coronavirus.
Cuando estemos listos para pagar, se debe evitar en la medida de lo posible el uso de monedas o dinero en efectivo, porque es una posible vía de transmisión (no solo de este, sino de cualquier otro microorganismo patógeno). No solo por nosotros, sino también para proteger al personal de caja. Es mejor pagar con una tarjeta de crédito o debito.
Es hora de regresar a casa. Si el desplazamiento se ha hecho en coche, tocar el volante no es un problema, porque al llegar nos lavaremos las manos (y, mientras tanto, seguiremos sin llevárnoslas a la cara). Pero es un buen momento para utilizar un gel desinfectante, si se dispone de él.
Por higiene hacer un cambio de ropa y bañarnos de inmediato después de haber desinfectado tu compra con un paño, trapo limpio con alcohol al 96% de preferencia o solución preparada con hipoclorito.
Lo que sigue entonces son buenas prácticas de seguridad alimentaria, aplicables ante cualquier patógeno: una buena higiene de manos, frotar bien la fruta y la verdura en agua abundante; prevenir la contaminación cruzada al usar los cuchillos; y cocinar bien los alimentos, entre otras.
Frente al miedo, siempre el conocimiento.
Aunque el riesgo cero no existe, hay una serie de recomendaciones que podemos tomar, empezando por las más básicas: si presentamos algún síntoma, no se puede ir al supermercado. Debemos quedarnos en casa y actuar siempre como si pudiéramos contagiar a otros. Usar el cubre bocas de manera obligatoria al salir de tu domicilio y desechar el mismo regresando
Tomar los cursos del IMSS, OMS son gratuitos entre otros donde pueden conseguir tu constancia de capacitación para todo tipo de profesional o cualquier persona que requiere saber más de como proteger a tus seres queridos.
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Elaborado por:
Director IREGA Cancún